En el límite entre Trevelin y Esquel hay un establecimiento dedicado a criar una raza de
caballos atípica en la Argentina: el Barock Pinto, el cual posee sangre de Frisón, un
majestuoso y elegante equino asociado a la realeza
de Países Bajos.
Hernán (“Nacho”) y Mercedes reciben al equipo periodístico de diario La Portada en su
chacra, a la vera de la Ruta N° 259, en el ejido municipal de Trevelin.
Están acompañados de cuatro perros. El más inquieto es “Samurái”, un border collie
bajito de energía infinita.
“Frisón Barock Cabalgata” es el nombre del emprendimiento que tiene dos grandes
razones de ser: criar caballos para la venta y brindar el servicio de cabalgatas.
Próximamente, ofrecerán paseos en carruaje para ocasiones especiales como
casamientos o cumpleaños de 15. Lo están evaluando.
Luego de la cálida bienvenida, y con la pava y el mate en mano, los dos anfitriones
invitan a conocer a los principales protagonistas del lugar, es decir, a los equinos que
cuidan como si fueron sus propios hijos. La devoción por ellos es plena y se percibe en
cada testimonio. En el potrero, cuidadosamente diseñado, aguar dan “Eclipse”,
“Espectro”, “Esencia”, “Elena”, “Eryn” y “Eragon”. El primero es el padrillo. Su nombre
calza justo. Eclipsa verdaderamente. Sobresale por su tamaño. “Elena” es la gran madre
del grupo. “La madraza”, le dicen. Todos lucen.
Mientras avanzamos con el recorrido, cuentan que llegaron al Valle “16 de Octubre” en
la época de la pandemia de coronavirus. Antes residían en San Carlos de Bariloche. En
la vecina Provincia de Río Negro adoptaron a los primeros tres caballos Barock Pinto. La
raza tiene cierto porcentaje de Frisón, un tipo originario de la zona norte de Países
Bajos que por su encanto suele ser utilizado para entrenamientos y demostraciones.
“Hace muchos años se usaban para trabajo e incluso se dice que participaron de las
guerras cruzadas”, explican. “Nacho” y Mercedes indican que son caballos de sangre fría
y dóciles. “Tienen un crecimiento más lento al habitual. Por eso, solo después de los
cinco años los empezamos a montar. Antes los preparamos para evitar problemas en la
columna”, agregan. El mate pasa de mano en mano.
La inversión en el establecimiento es grande. No solo inversión de tiempo, también de
recursos económicos y materiales. Diseñaron artesanalmente potreros, pasillos y
establos abiertos. La intención es que los animales vivan bajo condiciones similares a las
de su habita natural. Añaden que “investigamos para encontrar las mejores opciones,
siempre pensando en ellos. Pretendemos hablar el idioma del caballo. Así es que vamos
buscando en internet las maneras más eficientes de organizar los potreros”.
En el 2018 “conocimos Trevelin y dijimos esto es lo que buscamos. Fue complicado
conseguir donde alquilar con tres caballos y cuatro perros, en plena pandemia.
Compramos cinco hectáreas y acá estamos“, dicen convencidos de haber tomado la
decisión correcta.
Lejos están de arrepentirse.
Mientras transcurre la conversación, “Nacho” y Mercedes trasladan a los caballos con
paciencia, les dan de comer y los peinan. Los perros, fieles custodios, giran alrededor.
Criar esta raza no es sencillo. Más allá de cuidarlos, exige presentar documentos y
recibir avales de Europa. Consultados si hay criaderos de Barock Pinto en otros puntos
del país, piensan unos segundos y responden: No hay muchas experiencias de esta
naturaleza. Sí quizás es posible encontrar algún equino de manera aislada. La pareja
arrancó con tres ejemplares. Hoy tienen diez y piensan en más. “Cuando vinimos a
Trevelin encontramos el lugar ideal para poder agrandar la familia. Aquí empezó la
aventura de tener cría con nuestro padrillo y Elena”, resaltan.
Cabalgatas y carruajes Además de criar, y eventualmente vender a distintos puntos del
país, en “Frisón Barock Patagonia” ofrecen un servicio de cabalgatas. El recorrido y la
duración varían de acuerdo a la destreza y el conocimiento previo de los interesados.
“Arrancamos la primavera pasada; vino mucha gente por el tema de tulipanes. En el
verano también tuvimos visitan tes. Llama la atención el porte de los animales. Después
del paseo, compartimos unos mates y conocemos historias de vida”, completan.
La novedad es que próximamente tendrán listo un carruaje de doble eje y cuatro ruedas
para paseos especiales. Está en el taller. Imaginan a novios, cumpleañeras o alguna
que otra actividad relacionada al turismo.