martes, 11 de diciembre de 2007

LETRADA PIERDE UNA HERRADURA

Hace diez días que la herraron y ya ha perdido la herradura de la mano derecha. Me dí cuenta cuando comenzó a fallarle la mano al pisar. El recorrido fue largo. Ya tocaba. Después de las primeras montadas, ambos con nuestras precauciones, ya vamos más sueltos, mas confiados. En realidad se debe a que nos vamos entendiendo mejor. Ella me va conociendo, y yo voy aprendiendo de su carácter. No debo olvidar que su sangre es la mitad de árabe. Se entiende que los cascos de Letrada, no están aún fortalecidos. Mucho tiempo en el picadero los han reblandecido y a la más mínima, ha perdido la herradura. Lo primero a tener en cuanta es que no está habituada a las vidias. Después a los caminos. Aquí en el mismo recorrido los tenemos de tierra, de asfalto, de cemento, de piedras. Atravesamos riachuelos, arroyos y pinares. Pero la nobleza de Letrada, en una potra de 44 meses, me enamora. El carácter me satisface. Cada día estoy mas convencido que los hispano árabes son propios para estos terrenos.